MES DEL COMPOSTAJE
Se celebra desde el 22 de marzo (día mundial del agua) al 22 de abril (día internacional de la tierra) por ello ofreceremos en este mes información referida al tema. A continuación, les brindamos los “Principios del compostaje” explicado por la ingeniera agrónoma (Doctora) María Corina Leconte.
El compostaje es un proceso de transformación de residuos orgánicos frescos en una materia orgánica apta para ser utilizada en la mejora de la productividad de suelos y plantas. Es realizado por numerosos microorganismos en determinadas condiciones.
Dichas condiciones son:
*buena mezcla inicial de residuos orgánicos (ricos en carbono vs ricos en nitrógeno),
*buena humedad (sin exceso, es decir, que no chorree agua) y
*buena aireación (ya que estos microorganismos necesitan oxígeno),
*suficiente cantidad de residuos que permita armar una pila con los mismos, de por lo menos 1 metro cúbico.
Durante el proceso de transformación que llevan adelante los microorganismos, se producen reacciones que liberan calor, con este mínimo volumen ese calor se conserva dentro de la masa de residuos y por lo tanto, la temperatura aumenta dentro de la pila durante un tiempo variable, según el residuo y el manejo. Este tiempo de altas temperaturas es sumamente importante, porque durante esta etapa se eliminan microorganismos que puedan generar enfermedades en las plantas o en las personas y también se eliminan semillas de malas hierbas que pueden venir con el residuo. Por lo tanto, esta etapa es fundamental, pues nos asegura obtener un producto sano y limpio.
En un compostaje domiciliario no conseguimos mucho volumen de residuos, por lo que no se logra esta etapa, por lo tanto, se deberá cuidar los residuos orgánicos que se incorporen dentro de la pila.
Nuestra tarea es preparar todo de tal manera de asegurar estas condiciones para que los microorganismos puedan actuar. La mezcla de residuos orgánicos se puede trabajar en pilas al aire libre o dentro de recipientes de buen tamaño.
Los residuos orgánicos se clasifican en ricos en nitrógeno o en carbono, y la mezcla se deberá realizar con estos dos tipos de residuos.
*Ejemplos de residuos ricos en nitrógeno: estiércoles animales, restos de frutas y verduras, restos de yerba mate, restos de café o té, entre otros.
*Ejemplos de residuos ricos en carbono: papel o cartón picados, hojarascas, aserrín, pasto seco, entre otros.
El residuo rico en carbono suele ser más seco, por lo que en general también sirve para equilibrar la humedad de aquellos residuos muy húmedos, como los restos de frutas y verduras.
Fuente y foto: Instituto Agrotécnico “Pedro M. Fuentes Godo”-FCA-UNNE.